Poniendo pegas

poniendo pegas

Muros desde la infancia

En ocasiones puedes encontrarte diciendo algo así: “Quiero ser feliz, tener una vida plena, pero…”. Ese “pero” da comienzo a una serie de pegas que pones para alcanzar tus objetivos o una disculpa para no encaminarte hacia ellos con ahínco.

Y esos muros que levantas en tu camino y que se hacen evidentes en forma de disculpas pudiste empezar a construirlos en tu infancia, asimilando cosas que te dijeron algunas personas importantes para ti (padres, maestros, etc.): “En nuestra familia somos gente nerviosa” o “Romperás muchos corazones cuando seas mayor” o “Eres un patoso, como tu padre”, etc.

Pegas para complacer

Otras veces te pones obstáculos a ti mismo para complacer a personas de tu vida actual que no quieren que cambies porque temen que dejes de mirar para ellas, o que tu evolución exija cambios en ellas que no quieren emprender.

Y esa resistencia a tus cambios te la pueden mostrar poniéndose enfermos, o tristes en cuanto notan que te sientes mejor.

Por supuesto, la mayoría de las veces no son conscientes de que te estén intentando manipular. Tampoco lo eres tu de estar cediendo ante ciertas presiones.

Pegas al placer

También puede ser frecuente que te apañes para boicotear cualquier ocasión en que puedas sentir placer o tener éxito.

Y si, a pesar de todo, consigues sentir placer o tener éxito puede que te dediques a pagarlo con algún tipo de malestar o procurando que la situación no se repita.

Como si te sintieras culpable de que las cosas te vayan bien y tuvieras que expiar por ello.

Como si no te merecieras ser feliz.

Y esto también puede tener su origen en experiencias infantiles, en momentos en que sentiste que eras envidiado porque las cosa te fuesen bien, o que alguien importante para ti sintió celos de tu encanto o de tu inteligencia o de cualquier otra cualidad que te hiciera ser admirado.

Responsable de lo imperfecto

En otros casos, los niños pueden creer que son responsables de que en su casa las cosas vayan mal.

Y esa idea de ser responsable de que lo que te rodea no sea perfecto puede perdurar durante toda la vida y generar mucho sufrimiento.

 

Por todo lo dicho anteriormente, creo que estarás de acuerdo en lo útil que puede resultarte el reconocer este tipo de modelos que te impiden, a veces, darte cuenta de que tienes derecho a una vida mejor.

Para ampliar sobre lo que acabas de leer puedes visitar este enlace:

Dilemas

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